Qué debería decir

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  • Describa en términos generales por qué usted y su pareja han decidido separarse.
     
  • Es importante que no le eche la culpa al otro padre, ya que ello solo servirá para aumentar la confusión de sus hijos.
     
  • Es importante recalcar que los niños no tienen la culpa. Tendrán que oírle decir esto muchas veces y de muchas maneras distintas, sobre todo en las primeras etapas de la separación o el divorcio. Las investigaciones demuestran que la primera reacción de la mayoría de los niños es un sentimiento de culpa y que ellos hicieron algo para causar la separación.
     
  • También tienen que escuchar que los adultos se separan o divorcian debido a problemas en su relación, pero no se separan de sus hijos; asegure a los niños que usted siempre será su padre o madre, y que no dejará de amarlos.
     
  • Aclare que su decisión es final; no debería darles a sus hijos una esperanza falsa de reconciliación, si ésta no existe.
     
  • Recalque que no van a perder a uno de sus padres.
     
  • Use sus respuestas como guía. No fuerce más conversaciones, pero recuérdeles gentilmente a sus hijos que siempre estará dispuesto a hablar más sobre el tema cuando estén listos para hacerlo.
     
  • Aliente a sus hijos a que le hagan preguntas y compartan sus inquietudes.

Puede usar estas frases para explicarles la situación a sus hijos

“Hemos hecho un gran esfuerzo, pero simplemente no podemos resolver nuestros problemas. Tanto tu padre/madre como yo los amamos mucho y seguiremos siendo sus padres, pero ya no viviremos juntos”.

"A veces los adultos tienen problemas, y tienen que resolverlos de alguna manera, si bien esto puede causar dolor a sus hijos. Sentimos muchísimo que esto les cause infelicidad, pero este cambio en nuestra familia no cambiará nuestro amor por ustedes".

“Sabemos que esto les causará trastornos, y nosotros también desearíamos que no ocurriera. Ustedes no tienen la culpa, y es importante recordar que siempre los amaremos y los cuidaremos".

“Siempre seremos sus padres, y ustedes siempre serán nuestros hijos".

“Ustedes no hicieron nada malo, y no pueden hacer nada para evitar lo que está ocurriendo”.

“Me imagino cómo se deben estar sintiendo, pero recuerden que este es un problema entre sus padres. No tiene nada que ver con lo que ustedes hicieron o no hicieron”.

“Puede ser difícil para ustedes imaginar que está ocurriendo este cambio en su familia, pero entre todos encontraremos soluciones. Siempre los cuidaremos y haremos todo lo posible para que la familia se acostumbre a este cambio".

“No tengan miedo de decirnos cómo se sienten o qué están pensando”.